José María Aznar

José María Aznar (1953- ), político español, presidente del gobierno (1996-2004). Principal jefe del Partido Popular (PP), reemplazó al socialista Felipe González al frente del gabinete, tras los 14 años de éste en la ejecución del poder.

2. INICIO DE SU ACTIVIDAD POLÍTICA

Nacido en Madrid el 25 de febrero de 1953, en 1970 inició sus estudios de Derecho en la Universidad Complutense de su ciudad nativa. En 1975 recibió su licenciatura y un año después recibió la oposición a investigador de finanzas del Estado.

Ingresó en Alianza Popular (AP) el 27 de enero de 1979, y en el mes de octubre fue denominado secretario general de dicho partido en La Rioja, donde residía por motivos profesionales. Electo por primera ocasión miembro del Congreso de los Diputados en 1982 (año en que se presentó por Ávila y que en 1986, 1989, 1993, 1996 y 2000 repitió en representación de Madrid), en junio de 1985 pareció denominado presidente de AP de Castilla y León, en el momento en que ya era, desde febrero de 1982, adjunto al secretario general del partido (puesto para el que se le reeligió en 1984 y 1986).

3. PRESIDENTE DE CASTILLA Y LEÓN

Aznar consiguió la conquista en las elecciones autonómicas castellano-leonesas de junio de 1987, por lo que el 21 de julio próximo pareció investido presidente de la comunidad autónoma de Castilla y León, gracias a la abstención del Centro Democrático y Social (partido liderado en el ámbito nacional por el que fuera presidente del gobierno Adolfo Suárez). Desde la sede de la Junta (gobierno autonómico) en Valladolid estimuló la propuesta privada con la puesta en marcha de una política que pronto recibió significativos frutos.

Abandonó la presidencia de la Junta castellano-leonesa en septiembre de 1989, al parecer denominado por Manuel Fraga (el 26 de agosto) su sucesor en la presidencia del Partido Popular (PP), nombre que recibió la antigua AP tras su refundación en enero de ese mismo año. Aznar fue refrendado por el Congreso que el PP conmemoró en marzo y abril de 1990, en Sevilla, donde se le eligió presidente, tras que el partido, con él a la cabeza, conquistara en las elecciones generales de octubre del año anterior vencer dos escaños más que en la legislatura anterior. Desde su ascenso a la presidencia del PP, desarrolló una activa labor con el propósito de reestructurar el centro-derecha español y hacer una alternativa política al gobierno del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). El 19 de abril de 1995 sobrellevó un atentado, perpetrado por el conjunto terrorista ETA, del que pareció ileso.

4. PRESIDENTE DEL GOBIERNO ESPAÑOL

Pese a ser derrotado en las ya mencionadas elecciones generales de 1989, así como en las de 1993, definitivamente consiguió la definitiva implantación de su partido con la conquista del mismo en las elecciones generales del 3 de marzo de 1996.

1. Primer periodo presidencial

El exiguo triunfo, que dejó a su partido a 20 escaños de la mayoría absoluta, hizo necesario un conformidad de gobernabilidad con los nacionalistas catalanes (Convergència i Unió), vascos (Partido Nacionalista Vasco) y canarios (Coalición Canaria); esta misión, en lo tocante al PP, corrió a puesto, especialmente, de Rodrigo Rato y Jaime Mayor Oreja. El 5 de mayo de ese año, Aznar tomó posesión del puesto de presidente del gobierno, un día tras ser investido por mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados. Su primer ejecutivo estuvo integrado por Francisco Álvarez-Cascos (secretario general del PP, que ingresó como vicepresidente primero y ministro de la Presidencia), los citados Rato (vicepresidente segundo, y ministro de Economía y Hacienda) y Mayor Oreja (titular de la cartera de Interior), Abel Matutes (Asuntos Exteriores), Margarita Mariscal de Gante (Justicia), Eduardo Serra (Defensa), Rafael Arias Salgado (Fomento), Esperanza Aguirre (Educación y Cultura), Javier Arenas (Trabajo y Asuntos Sociales), Josep Piqué (Industria y Energía), Loyola de Palacio (Agricultura, Pesca y Alimentación), Mariano Rajoy (Administraciones Públicas), José Manuel Romay Beccaría (Sanidad y Consumo) e Isabel Tocino (Medio Ambiente).

De inmediata, y con la tentativa de cumplir los propósitos dispuestos por la Unión Europea (UE) para conquistar la denominada Unión Económica y Monetaria, su gobierno aceptó una serie de medidas inmediatas para la reactivación de la economía y el fomento del empleo, que consiguieron un decidido avance tras la sella de nuevos pactos entre los agentes sociales (sindicatos y emprendedores) en 1997 con la mediación del ejecutivo. El 2 de mayo de 1998, la cumbre que convocó en Bruselas a los primordiales mandatarios de la UE, entre los que se encontraba el propio Aznar, aceptó la definitiva lista de los once países que integrarían el conjunto de vanguardia de la recién desarrollada moneda única europea (el euro), España entre ellos.

Dos semanas tras el comunicado de una tregua indefinida y total por parte de ETA, el 2 de octubre de 1999 manifestó que su gobierno abriría el proceso de paz si la organización terrorista demostraba que el cese del uso de las armas era definitivo. El 3 de noviembre próximo señaló del comienzo de contactos directos entre representantes de su gobierno y la propia ETA, que en diciembre se extendieron a Euskal Herritarrok (EH), la plataforma que sucedió a comprender meses antes a la organización más cercana a los extremistas, Herri Batasuna (HB). Pero, el 27 de noviembre de 1999 ETA puso fin a la tregua, al considerar que no se se encontraba profundizando en el “proceso de construcción nacional” vasco.

En el XIII Congreso del PP, conmemorado en Madrid a finales de enero de 1999, y durante el cual volvió a ser denominado presidente del partido al tiempo que Álvarez-Cascos cesaba en la secretaría general, definió a la nueva política de su formación política como “de centro”.

2. Segundo periodo presidencial

El PP recibió la mayoría absoluta en las elecciones legislativas que tuvieron lugar el 12 de marzo de 2000, y superó en 16 el número de escaños conseguidos cuatro años antes en el Congreso de los Diputados, lo que aceptó a Aznar formar un nuevo gobierno sin el menester de establecer pacto de legislatura alguno. Investido por segunda vez presidente del gobierno por el Congreso de los Diputados el 26 de abril de ese año, al día próximo juró la posición y nombró a los integrantes de su nuevo gabinete. Éste (que tenía una nueva configuración de carteras) lo constituían Rajoy (vicepresidente primero y ministro de la Presidencia), Rato (vicepresidente segundo y ministro de Economía), Mayor Oreja (que repetía como titular de Interior), Piqué (Asuntos Exteriores), Ángel Acebes (Justicia), Federico Trillo (Defensa), Álvarez-Cascos (Fomento), Pilar del Castillo (Educación y Cultura), Juan Carlos Aparicio (Trabajo y Asuntos Sociales), Miguel Arias Cañete (Agricultura, Pesca y Alimentación), Jesús Posada (Administraciones Públicas), Celia Villalobos (Sanidad y Consumo), Jaume Matas (Medio Ambiente), Cristóbal Montoro (Hacienda), Anna Birulés (Ciencia y Tecnología) y Pío Cabanillas (ministro representante). En febrero de 2001, este ejecutivo se vio remodelado tras presentarse Mayor Oreja candidato a lehendakari en las elecciones autonómicas vascas: Rajoy se sostuvo como vicepresidente primero, asumió la titularidad del Ministerio del Interior, y fue reemplazado en la de la Presidencia por Juan José Lucas.

Aznar fue denominado presidente de la Internacional Demócrata de Centro en noviembre de 2001, en enero de 2002 sucedió a ejercer la presidencia de turno del Consejo de Ministros de la UE, y durante ese mismo mes pareció de nuevo reelegido presidente del PP en el intervalo de su XIV Congreso.

El año 2002, que había empezado con la entrada en circulación del euro en España, fue pródigo en capítulos importantes para su gestión. El 20 de junio, apelada por la Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO), sucedía una huelga general como protesta contra el real decreto ley de Reforma del Sistema de Prestaciones por Desempleo promovido por su gobierno. Muy poco después, el 9 de julio, Aznar desarrolló una nueva remodelación de su gabinete. Mantuvieron las carteras que ejercían desde abril de 2000 Rato, Trillo, Álvarez-Cascos, Del Castillo, Arias Cañete, Montoro y Matas (en el momento en que éste se transformó en candidato a la presidencia del gobierno autónomo balear, en marzo de 2003, la cartera de Medio Ambiente sucedió a Elvira Rodríguez); en tanto que Javier Arenas reemplazó a Jesús Posada en el Ministerio de Administraciones Públicas, Ana Pastor a Celia Villalobos en Sanidad y Consumo, Eduardo Zaplana a Juan Carlos Aparicio en Trabajo y Asuntos Sociales, Ángel Acebes asumió la titularidad de Interior (Rajoy se sostuvo como vicepresidente primero, retomó de Lucas el Ministerio de la Presidencia y reemplazó a Pío Cabanillas como ministro representante), Josep Piqué reemplazó a Anna Birulés en Ciencia y Tecnología, José María Michavila a Acebes en Justicia, y Ana Palacio a Piqué en Asuntos Exteriores.

Por lo que respecta a esta última, si ya su precursor afrontó las complejas negociaciones con el Reino Unido por Gibraltar, ella tuvo, poco tras tomar posesión, que vivir momentos de tensión con Marruecos. Las relaciones diplomáticas entre ambos países habían experimentado un sucesivo deterioro con precedencia, como consecuencia de toda una serie de circunstancias de fricción (diferentes pareceres ante la cuestión del Sahara Occidental, separación de los acuerdos pesqueros). En este entorno, efectivos militares de Marruecos ocuparon el 11 de julio de 2002 un islote ubicado a pocos metros de su costa. Deshabitado, denominado Perejil por España y Leïla por los marroquíes, el conflicto surgido sobre la soberanía sobre este pequeño territorio (que el gobierno del monarca Muhammad VI pasaba así a discutir a España) significó la chispa definitiva especialmente el citado red de desencuentros existentes. Aznar y su ejecutivo reaccionaron con la integración de otra acción militar y, así, fuerzas españolas desalojaron al contingente marroquí, ocuparon brevemente el islote, y lo dejaron pocos días después, instando a Rabat para que se retornara a la situación previa al comienzo del conflicto, esto es, sin presencia de ninguno de los dos países. La normalización de relaciones diplomáticas no sucedía hasta enero de 2003.

A lo largo de su segundo periodo al frente del Consejo de Ministros, Aznar promovió desde el ejecutivo copiosas propuestas legislativas encaminadas a terminar su proyecto político. Entre ellas, el Plan Hidrológico Nacional, la Ley Orgánica de Calidad de la Educación, la Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud (o Ley de Sanidad) y la reforma del Código Penal. Muchas fueron severamente criticadas por el destacado partido de la oposición, el PSOE, con cuyo jefe, José Luis Rodríguez Zapatero, sostuvo serias distinciones. Éstas se acentuaron en extremo durante la ya citada dificultad de Perejil, con motivo del desastre del Prestige (noviembre de 2002) y, muy especialmente, por el significado alineamiento de Aznar junto al gobierno americano de George W. Bush, y al británico de Tony Blair, durante la dificultad de Irak (últimos meses de 2002 y primeros de 2003). Sus posiciones estuvieron más próximas, en cambio, en materia antiterrorista; así, el Pacto de Estado por las Libertades y contra el Terrorismo, sellado por el PSOE, el PP y el gobierno en diciembre de 2000, sirvió de marco para ulteriores representaciones como la Ley de Partidos Políticos. En virtud de ésta, el gobierno y la Fiscalía General del Estado presentaron sendas demandas para conquistar la ilegalización de Batasuna (‘heredera’ de EH) por su vinculación con ETA, lo que el Tribunal Supremo falló en marzo de 2003.

En septiembre de 2003, Aznar, que ya había comunicado que no optaría a la reelección en 2004, sugirió al Comité Ejecutivo Nacional del PP que Mariano Rajoy accediera al puesto de secretario general del partido y a la condición de próximo candidato presidencial de los conocidos. Al ser aprobadas ambas cuestiones por la Junta Directiva Nacional del PP, Rajoy salió del gobierno, al igual que Piqué (cabeza de las listas del PP en las inminentes elecciones autonómicas catalanas). Ello forzó a Aznar a realizar nuevos reajustes en su conjunto de gobierno: Rajoy fue reemplazado como vicepresidente primero por Rato, como ministro de la Presidencia por Arenas (quien además era vicepresidente segundo), y como ministro Portavoz por Zaplana (quien de igual forma propugnaba la cartera de Trabajo y Asuntos Sociales); Piqué fue acontecido al frente de Ciencia y Tecnología por Juan Costa; por último, Julia García-Valdecasas tomaba el relevo de Arenas en Administraciones Públicas.

Sus últimas semanas al frente del ejecutivo estuvieron indicadas por los atentados extremistas del 11-M, que conformaron la más grave acción de este tipo sufrida por España en su historia: el 11 de marzo de 2004, una serie de bombas puestas por extremistas islamistas en diversos trenes de Madrid provocaron más de 190 muertos y casi 2.000 lastimados. Tres días tras este suceso, las elecciones generales confirieron el triunfo al PSOE, cuyo candidato, Rodríguez Zapatero, ocurrió a Aznar en la presidencia del gobierno en el próximo mes de abril.

5. TRAYECTORIA POSTERIOR

En el intervalo del XV Congreso Popular, conmemorado en octubre de 2004, Rajoy reemplazó en la presidencia del PP a Aznar, el cual recibió la condición de presidente de honor del partido.

Por otra parte, a comienzos de 2005, aceptó el ofrecimiento de Francisco Rubio Llorente, presidente del Consejo de Estado, para integrarse al mismo en calidad de consejero nato vitalicio (esta ocurrencia había estado antecedida por la entrada en vigor de la reforma de la ley reguladora de esta fundación, asegurando tal condición a los ex presidentes del gobierno que así lo anhelaran); su ingreso efectivo en dicho órgano sucedía en abril de ese año.

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