Matrimonio en Arabia Saudí

Se suelen concertar los casamientos, si bien una ascendente minoría de jóvenes urbanos está comenzando a tomar la elección a sus cónyuges. Elenlace matrimonial convencional consiste en una celebración musulmana que entiende la firma del contrato matrimonial negociado por ambas familias. Normalmente el hombre paga una dote por su mujer y ésta suele emplear una parte en su nuevo hogar. Al culto nupcial le siguen unas celebraciones separadas para los hombres y las mujeres. La ley islámica permite tener hasta cuatro cónyuges, sin embargo la mayoría de los hombres de este país sólo tiene una, pues tener otra significa que debe contar con la aprobación de la mujer o mujeres previamente y conservar a todas ellas por igual. La infidelidad es un crimen y está fuertemente penada.

La familia convencional está sometida por el hombre, sin embargo la mujer ejerce una influencia considerable en el hogar. La mayoría de las familias viven como familias espaciosas, sin embargo en las ciudades son más habituales las familias nucleares, aunque los hijos y sus familias vivan generalmente en un vecindario cerca del hogar paterno.

El Corán indica que hombres y mujeres son iguales, sin embargo no ocurre igual con las responsabilidades de cada uno. La división por sexos es algo normal en la vida de Arabia Saudí, fortalecida por una conservadora representación del islam. Las normas de conducta femenina están inspiradas en las leyes del país y la tradición, y son establecidas para respetar y resguardar el honor y la modestia de la mujer. Los dos sexos están separados en los puestos de trabajo. Las doctoras se ocupan de las mujeres y los niños, mientras que los médicos se ocupan de los pacientes masculinos. Hombres y mujeres no se relacionan en público; la mujer, además, debe llevar un va contertulio masculino en el momento en que sale de casa. Una policía religiosa se asegura de que se cumpla concienzudamente la ley islámica y se sigan las normas en el vestir. A la mujer no le está permitido el trato con los hombres que no sean de su conjunto familiar, conducir vehículos o montar en bicicleta. Estas leyes igualmente se aplican a los extranjeros.

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