Alfabetos artificiales

La mayoría de los alfabetos de los que trata el presente artículo son formas que proceden de otros más antiguos. Pero, existen otros que han sido desarrollados para suministrar un mecanismo gráfico a los pueblos cuya lengua no tenía forma escrita; en ese caso no son evoluciones propias, sino que aceptan alfabetos de origen foráneo. Ése es el caso del armenio, cuyo alfabeto, inventado por san Mesrob en el año 405, aún está imperante. Otro caso es el silabario del cherokee inventado en 1820 por el jefe indio Secuoya. Algo después los misioneros desarrollaron igualmente, para las lenguas indígenas del noroeste americano, otros silabarios cuyo origen era el alfabeto romano y el cirílico.

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