Alemania: Segunda Guerra Mundial

El Tratado de Versalles no solucionó los conflictos europeos. Los anhelos de Alemania de rastrear una revisión del Tratado forzosamente hicieron inútiles los intentos de otros países que querían soslayar el enfrentamiento a toda costa, lo que condujo a la Segunda Guerra Mundial.

7.9.4.1 Los pasos hacia el conflicto bélico

Las amenazas de Hitler querían que las potencias europeas examinaran los límites de Alemania. Su propósito de unir a todos los alemanes a través de la conquista de un Lebensraum (espacio importante) no parecía irracional para algunos estadistas, quienes comprendieron que el Tratado de Versalles era demasiado duro para Alemania. Paralelamente, consideraron que las demandas de Hitler no eran lo suficientemente graves como para producir el estallido de una nueva guerra, por lo que no intervinieron para parar su política violenta. Alemania dejó la Sociedad de Naciones en 1933 y arrancó con el rearme en 1935 rompiendo lo pactado; en 1936 volvió a ocupar Renania. Alemania firmó el Pacto Anti-Komintern con Japón y formó una alianza con la Italia fascista, desarrollando el Eje Roma-Berlín-Tokio. En 1938, manifestó el Anschluss (unión) con Austria. En Munich, ese mismo año, Gran Bretaña, Francia e Italia accedieron a la demanda de Hitler de ocupar la región de los Sudetes en Checoslovaquia con mayoría de población germánica, bajo la promesa de que Alemania quedaría complacida en sus pretensiones territoriales.

En marzo de 1939, rompiendo su palabra, Hitler ocupó el resto de Checoslovaquia. En agosto, se modificando absolutamente su política anticomunista, hizo un pacto de no agresión con la Unión Soviética que contenía una cláusula secreta sobre la partición de Polonia. Sus reiteradas demandas sobre Danzig condujo a un pacto entre polacos y británicos y a la movilización el ejército polaco. El 1 de septiembre, Alemania invadió Polonia. Gran Bretaña y Francia declararon a continuación el conflicto bélico a Alemania: la Segunda Guerra Mundial había empezado.

7.9.4.2 Las etapas del conflicto bélico

A lo largo de la fulgurante Blitzkrieg (guerra relámpago), las divisiones mecanizadas germánicas arrollaron a las mal equipadas tropas polacas, ocupando el oeste de Polonia. Los soviéticos, conforme lo negociado, tomaron la parte oriental. Alentados por el triunfo, en 1940 Alemania invadió y ocupó Dinamarca, Noruega, los Países Bajos y Francia, cuyas defensas vertiginosamente se vinieron abajo; las tropas británicas y francesas fueron evacuadas apresuradamente desde Dunkerque hacia Gran Bretaña. Hitler así pues bloqueó este país con submarinos y bombardeó el territorio británico con su nueva fuerza aérea. Mientras firmó un pacto de ayuda militar de diez años con las otras potencias del Eje —Italia y Japón—. En 1941, para auxiliar a las titubeantes fuerzas italianas, mandó tropas al norte de África, Grecia y Yugoslavia. Para llevar a cabo su idea de Lebensraum, y pese al pacto de no agresión germano-soviético, invadió la Unión Soviética por sorpresa. Como los soviéticos se reorganizaron hacia el este, los ejércitos alemanes ocuparon la rica Ucrania.

En este momento, Hitler era el propietario del continente europeo. En 1942, sin embargo, Gran Bretaña aún resistía y Estados Unidos, que había accedido en el conflicto bélico después del ataque japonés a Pearl Harbor, se encontraba enviando suministros a británicos y soviéticos. Hitler así pues ordenó la movilización total de hombres y recursos. Por toda Europa (en especial los pueblos considerados inferiores, como eslavos y judíos) fueron exterminados o se vieron empujados a trabajar en las industrias de guerra germánicas, mientras que sus países sufrían la requisa de alimentos y materias primas.

En 1943, la situación varió. La ofensiva soviética condujo gradualmente a las tropas germánicas hacia el oeste. Las fuerzas del Eje en África del Norte fueron derrotadas e Italia fue invadida. La misma Alemania, desde 1942, inició a ser bombardeada de forma intensiva. A pesar de que la derrota era ineludible, Hitler rehusó rendirse. El resultado del conflicto bélico se aclaró más en el momento en que las fuerzas británicas y americanas desembarcaron en Normandía en 1944 y aventajaron de forma inexorable hacia el límite germánico, mientras los soviéticos hacían lo mismo en el frente oriental. Hitler se suicidó antes de que los tanques soviéticos entraran en abril de 1945 en Berlín.

7.10 Ocupación y partición

La rendición definitiva de Alemania acabó con el III Reich. Los seguidores redujeron Alemania a sus límites previos al comienzo de la contienda y asignaron una gran porción del territorio del este a Polonia. Se establecieron cuatro zonas de ocupación, los mandatarios nazis fueron juzgados como criminales de guerra y se desmantelaron sus industrias. Pero como las políticas divergían, Alemania fue dividida en dos partes. Gran Bretaña, Estados Unidos y Francia querían reintegrar a Alemania dentro de las grandes potencias de Europa Occidental capaz de contener las tendencias expansionistas de la URSS. En 1948, unieron sus zonas de ocupación y animaron a los alemanes a formar un gobierno democrático. La URSS, por otro lado, creó otro Estado. En 1949, esta polarización de Alemania se legalizó tras la producción de dos Estados alemanes: la República Federal de Alemania, o Alemania Occidental, y la República Democrática de Alemania o Alemania Oriental.

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