Alejo Fernández (c. 1475-1545), pintor español de origen germánico que condujo a cabo su actividad artística en Andalucía, dentro del estilo del primer renacimiento. Está estimado la figura más representativa de la escuela sevillana del primer tercio del siglo XVI.
Se considera que nació hacia 1475 en algún lugar de Europa central, aunque ciertas biografías le atribuyen un origen cordobés. En 1496 es sabido que se encontraba en esta ciudad, donde contrajo casamiento con la hija de un pintor, María Fernández, de quien tomó su apellido. En Córdoba pintó una de sus obras más conocidas, Cristo atado a la columna (Museo de Bellas Artes), en la que se aprecia la influencia de la pintura italiana en el tratamiento de la perspectiva. En 1508 se desplazó a Sevilla, donde residió hasta su fallecimiento. Para el retablo de la capilla mayor de la catedral hispalense pintó, entre otras obras, El nacimiento de la Virgen y La adoración de los Reyes. Hacia 1520 le encomendaron el retablo de la capilla del colegio de Santa María de Jesús, una pieza de sorprendente belleza presidida por la imagen de la Virgen con el Niño y maese Rodrigo, el autor del centro. De su vasta producción de retablos sobresalen igualmente el de la iglesia de Santa Clara, en Sevilla (1520), y el de la parroquia de Marchena (1521).
Adicionalmente de lo antes aludido, entre sus pinturas más conocidas sobresalen la Virgen de la rosa de la iglesia de Santa Ana, Sevilla, y la Virgen de los navegantes, de los Reales Alcázares, igualmente en Sevilla. En esta tabla, de asunto peculiarmente hispalense, se aprecia el interés del artista por representar con minuciosidad los aspectos de cada uno de los personajes, en especial los de Cristóbal Colón. En el Museo del Prado de Madrid se conserva La flagelación de Cristo. El estilo de Alejo Fernández evidencia tanto la presencia de tendencias flamencas y germánicas como el conocimiento de lo italiano.
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