El renacimiento clasicista y la Reforma protestante afectaron hondamente las artes del siglo XVI y transformaron la educación.
7.6.5.1 Las artes visuales
El estilo gótico tardío continuaba en pintura y escultura, caracterizado por la religiosidad religiosa y el gusto por los detalles refinados. Tanto los maestros pintores Matthias Grünewald y Stefan Lochner, y los escultores Veit Stoss, Peter Vischer el Viejo, Adam Kraft y Tilman Riemenschneider dedicaron un gran esfuerzo en la realización de vidrieras y retablos. El estilo renacentista, caracterizado por motivos clásicos y el interés en el mundo de la naturaleza, fue introducido desde Italia por Alberto Durero. Lucas Cranach el Viejo y Hans Holbein el Joven evidenciaron el énfasis humanista sobre el individuo en sus retratos. Durero y Martin Schongauer conjuntaron los elementos góticos y renacentistas en las nuevas técnicas de grabados en madera y cobre, empleados para la ilustración de obras escritas en la imprenta.
Hasta la Reforma se sostuvo el gótico tardío como estilo arquitectónico, momento a partir del cual se detuvo prácticamente la construcción de iglesias. Los protestantes declinaron las expresiones artísticas en las iglesias, aunque la burguesía gastó monumentales cuantías en casas con tejados empinados, con red de madera, y pintadas de forma decorativa. Igualmente se edificaron opulentos palacios y ayuntamientos siguiendo el estilo renacentista.
7.6.5.2 Literatura y erudición
La tradición medieval continuó en la literatura popular germánica en la forma de canciones conocidos, anécdotas conectadas con titanes convencionales y obras religiosas y seculares que igualmente seguían la tradición. Los asuntos convencionales y clásicos suministraron rebosante material para los Maestros cantores, poetas líricos que escribían conforme las estrictas formas de los minnesänger arcaicos. El más destacado entre ellos fue Hans Sachs, un zapatero de Nuremberg.
El acontecimiento literario más significativo fue la traducción de Lutero de la Biblia en lengua vernácula, que contribuyó a dar a la población germánica una lengua literaria unificada, pues se transformó en la base para la masificación del alto germánico. Lutero y otros escribieron himnos en germánico para las congregaciones protestantes, una innovación litúrgica que condujo a la fundación de la música eclesiástica germánica e ejerció influencia en el culto en la totalidad del mundo protestante. Philip Melanchthon, un docente de la Universidad de Wittenberg, presentó visiblemente las doctrinas protestantes en latín al mundo no germánico. Él y otros humanistas introdujeron el conocer clásico en las universidades de Colonia, Leipzig, Viena y otras ciudades, y ayudó a instituir nuevas universidades en Königsberg, Jena y Marburg.
7.6.5.3 Educación
Las órdenes religiosas habían suministrado la educación medieval germánica, que se encontraba limitada especialmente a escuelas y universidades para formar a los eclesiásticos y a unos pocos empleados públicos gubernamentales. Incluso la nueva educación humanista se encontraba proyectada en un principio para una pequeña elite erudita. Pero Lutero, con su convicción en el sacerdocio de todos los devotos y el estudio individual de la Biblia, consideró que las escuelas estatales tendrían estar abiertas para los niños de todas las clases sociales. En los Estados protestantes, las escuelas privadas se arraigaron para dar lección germánico y religión. El latín fue la destacada materia en las escuelas secundarias (Gymnasien) desarrolladas por Melanchthon, que presentaron un programa graduado de estudios por primera ocasión. Sajonia y otros estados protestantes abrieron gradualmente Gymnasien, que ejerció gran influencia en la educación germánica hasta el siglo XX. En los Estados católicos se arraigaron escuelas de forma parecida sin embargo altamente centralizadas. Pero, a todas estas escuelas acudían especialmente los niños cuyas familias podían costear las matrículas (inscripciones).
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