Ni pan hervido, ni mujer de otro marido. la…

Ni pan hervido, ni mujer de otro marido.
Porque las sopas de pan, salvo las que llaman hervidas -explica el proverbista-, se desgracian cuando se dejan hervir, y en cuanto a la mujer de otro marido, porque esta, quieras que no, tendera siempre a la comparacion con el difunto.

3 Comentarios Quien bien quiere a Beltran, bien quie…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *