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c&inico

cinico
Este tan negativo adjetivo de nuestra lengua es realmente un modelo de cambio semántico no demasiado frecuente. Pero veamos primero su origen y después hablemos de dicho cambio.
La palabra cinico es muy antigua en nuestra lengua (está documentada antes de finales del siglo XV) y procede del latin cynicu(m), donde tenia dos significados: ‘propio de los perros’ y también ‘de la escuela [filosofica] cinica’. Esta aparente disparidad de valores se explica perfectamente por el ultimo de ellos. Ocurre que en la Grecia del siglo IV a. C., Diogenes, Hiparco y Antistenes (discipulo de Socrates) fundaron una secta que defendia que la virtud era el supremo bien y el unico modo de conseguir la felicidad, despreciando riquezas y honores. Esto, llevado al extremo, les hacia aparecer como personas que pretendian volver a la naturaleza, despreciando las convenciones sociales, la opinion publica y la moral admitidas comunmente. De aquí solo habia un paso para que empezaran a ser considerados como hombres que expresaban sin contemplaciones ni miramientos sus sentimientos, las opiniones contrarias a la moral recibida, a las conveniencias morales. Es decir, que se manifestaban sin más decoro que el que tiene un perro cuando fisicamente necesita manifestarse, haciendo gala de una ignorancia absoluta de las normas sociales: impudicamente. Y de esta idea del perro recibieron el nombre en griego de kynicos, que es como se llama a este animal.
Pero retomando el principio de nuestro comentario, descubrimos que en español llamamos también cinico al que oculta sus ideas, al que simula que llora ante un problema que realmente no le afecta, al que rechaza en publico lo que en privado defiende y practica, es decir, ha pasado a ser sinonimo de su antonimo hipocrita. Este fenomeno se aprecia en palabras como enervar, por ejemplo, que ha pasado de significar ‘tranquilizar’ (de ex- nervare), a usarse hoy con el valor exactamente contrario, de ‘poner nervioso, poner de los nervios’. La razon o razones no son siempre diáfanas y, como hipotesis, podriamos decir que en el caso de los cinicos, simplemente podria haber ocurrido que la sinceridad, la honradez son también convenciones sociales que ellos, como tales cinicos, tienen a gala no aceptar y actuan en consecuencia.

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