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Cigarras

Cigarras

Las cigarras son insectos que pertenecen al orden Homoptera de la familia Cicadidae. Estos insectos tienen un largo período de transformación que llamamos metamorfosis. La metamorfosis en los insectos es común, y las cigarras son los únicos que producen el sonido alto y estridente que conocemos.

Las hembras adultas son fertilizadas por la cigarra macho en el período de intensa agitación, que es cuando los machos cantan más. Una vez fecundadas, las hembras ponen sus huevos en las ramas y las hojas de las plantas, y mueren poco después. Cuando los huevos de las cigarras eclosionan, salen ninfas (insectos jóvenes) que descienden de la planta y se entierran en el suelo, alimentándose de la savia de las raíces. Algunas especies de cigarras pueden permanecer hasta diecisiete años enterradas en el subsuelo.

Dependiendo del tipo de timbre, la fase en la que está enterrado en el suelo puede durar de cuatro a diecisiete años. Después de pasar por este período ella abandona el suelo y sube en los árboles. Una vez en los árboles, la cigarra sufre un cambio, volviéndose adulta y estando preparada para el apareamiento.

Cada especie de cigarra tiene un rincón diferente, y las más altas hacen más ruido, sobre todo en un clima más cálido. El sonido producido por las cigarras sirve para atraer a la hembra y para mantener alejados a los depredadores

El ruido producido por las cigarras es alto, por eso tanto machos como hembras poseen un par de membranas que funciona como orejas, para que el sonido estridente no cause daños al insecto.

Las cigarras machos producen sonidos no sólo para atraer a las hembras, sino también para mantenerse bien lejos de los depredadores, especialmente las aves. Los sonidos fuertes y agudos afectan al oído sensible de las aves e interrumpen la comunicación del grupo.

Las cigarras tienen relevancia positiva y negativa en el ecosistema. La importancia positiva es la de servir como alimento para los depredadores, y la negativa es la de ser plaga para algunas culturas. Cuando las ninfas de las cigarras están bajo tierra, succionan la savia de las raíces de las plantas, provocando lesiones que sirven como puerta de entrada para bacterias y hongos causantes de enfermedades.

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