candidato
Los antiguos romanos tenian la creencia (o querian tenerla) de que cualquier persona que aspirara a un cargo publico o a algun honor debia tener el espiritu y la conciencia limpios, y más exactamente, blancos, por lo que de este color era precisamente la tunica que esa persona vestia al ser propuesta. Y se llamaban así porque la voz latina candidu(m) significa exactamente ‘blanco’, como se mantiene en palabras como cándido, candor o la menos afortunada candidiasis, enfermedad caracterizada por la presencia de manchas blancas. Candidato era, en fin, el ‘blanqueado’, es decir, el ‘que está blanco, sin mancha’.