#Enciclopedista

A comienzos del siglo XX se idearon instrumentos electrónicos como el Telharmonium o el Theremin, sin embargo eran muy rudimentarios en su construcción y liosos en su funcionamiento. Los sintetizadores e instrumentos electrónicos con amplificación, susceptibles de ser empleados en las representaciones en vivo, se perfeccionaron en la década de 1960. La computadora central RCA fue en esencia uno de los primeros sintetizadores electrónicos. El aparato contenía todos los recursos indispensables para hacer y modificar los sonidos por medios electrónicos. En la década de 1960, Robert Moog, Donald Buchla y los fabricantes británicos EMS, entre otros, comenzaron a hacer sintetizadores que utilizaban el control de voltajes. Se trataba de un medio electrónico para variar el tono o el volumen, y se empleaba para hacer, filtrar y modificar, sonidos electrónicos. Pronto florecieron sintetizadores que ofrecían una serie de sonidos y efectos pregrabados. Éstos serían empleados cada vez más con propósitos comerciales, desde los comunicados de la televisión hasta la banda sonora de cintas de ciencia ficción. Hoy existe una holgada diversidad de sintetizadores, aptos de imitar casi cualquier sonido y de hacer gamas tonales y timbres absolutamente nuevos.

Los nuevos instrumentos musicales electrónicos de la década de 1960 igualmente coadyuvaron al crecimiento de la música electrónica en vivo, en la cual la producción y la manipulación electrónica del sonido ocurren en tiempo real (esto es, que se tocan y se escuchan en el momento). Paralelamente, algunos compositores desarrollaban música electrónica en vivo con conjuntos fabricados por ellos mismos. La obra Solo de Stockhausen (1966), por ejemplo, utilizaba un complejo método de retardo de la grabación que requería cuatro ayudantes para su representación. A lo largo de la década de 1960, florecieron muchos conjuntos de música electrónica en vivo, muchos de los cuales representaban música improvisada de carácter teatral. En años recientes, la revolución tecnológica igualmente se tradujo en el surgimiento de muchos instrumentos electrónicos y programas de computador diseñados para las representaciones en directo. Destacan, entre otros, el músico y diseñador de instrumentos Michel Waisvisz, que trabaja en los estudios STEIM de Holanda, autor de diversos instrumentos como el denominado The Hands (las manos), en el cual el movimiento de las manos del intérprete en el espacio activa sonidos complejos y permite manipulaciones sonoras. El compositor-intérprete americano George Lewis combina la improvisación al trombón con programas personalizados de estructura por computador que trabajan de manera simultánea. La estación de trabajo de procesamiento de señales elaborada en el IRCAM permite una manipulación muy compleja en tiempo real de los sonidos instrumentales y sintéticos. Adicionalmente de estos interfaces (superficie de contacto) altamente especializados, muchos compositores e intérpretes usan algunas cajas de efectos disponibles en el mercado, diseñadas pensando en el mercado de la música popular.

La evolución del sintetizador y la guitarra eléctrica a partir de la década de 1950 igualmente ha influido en gran medida en el mundo del pop y la música rock. Los progresos tecnológicos fueron acogidos con entusiasmo por conjuntos como Grateful Dead, Pink Floyd y Velvet Underground. En la década de 1980 se inventó una nueva forma de trabajar con instrumentos de música electrónica dirigida al mercado popular: el denominado MIDI (interfaz digital de instrumentos musicales). El MIDI no es un instrumento musical, sino un medio que permite a los sintetizadores y otros conjuntos comunicarse unos con otros mediante el envío de instrucciones digitales. Por ejemplo, mediante el MIDI un intérprete puede hacer que varios sintetizadores respondan en el momento en que se toque uno de ellos. El uso de la tecnología musical en la música pop y rock es tan importante que la naturaleza de los instrumentos y las otras tecnologías musicales conectadas con la música electrónica están dictadas, en gran medida, por las necesidades de la industria del rock.