La mayoría de las jóvenes paraguayas conmemoran una celebración al cumplir los 15 años y transformarse en señorita. Los jóvenes se relacionan en las celebraciones locales, en las grandes reuniones familiares, en los bailes, etcétera. Por lo general, los padres tienen la intención de aceptar a las relaciones de sus hijos. Para que un casamiento sea legal debe realizarse un enlace matrimonial civil, sin embargo las relaciones que lo deseen igualmente pueden contraer matrimonio por la iglesia. Muchas relaciones conviven sin estar comprometidas, mientras otras tienen hijos sin embargo no viven juntas.
Tres o cuatro concepciones de una familia espaciosa pueden repartir la misma hogar o vivir juntas en una granja. Los hijos cuidan de sus padres en el momento en que éstos se hacen mayores. El padre es el cabeza de familia y la madre se ocupa de la casa. La mayoría de las mujeres de las extensiones rurales, al igual que los hombres, trabajan en la agricultura. Alrededor del 43,3% (2006) de la población activa urbana es femenina.
Las familias del medio rural sólo gozan de unas pocas comodidades que ofrecen los adelantos modernos. Viven en casas de madera con pisos de tierra y techos de paja o de chapa. Las casas urbanas están producidas de cemento con techo de tejas. Casi todas las casas de Asunción tienen agua corriente y electricidad.
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