Alóctono (del griego allos, ‘otro’; chthon, ‘tierra’), ente (biológico o no) no indígena, adquirido, natural de otro lugar diferente al que se encuentra. Un animal alóctono en España es, por ejemplo, el periquito de collar o cotorra de Kramer (Psittacula krameri), especie introducida en los hogares como mascota y que al desbandarsese de sus jaulas o ser liberado por sus propietarios se ha asilvestrado y se ha transformado en una especie localmente opulenta. Otro caso parecido es el de la carpa (Cyprinus carpio), que fue introducida en tiempos históricos por los romanos para decorar y sanear los estanques de sus villas, y que hoy en día está distribuida por montón de ríos españoles. Como caso de planta alóctona podemos citar el ailanto (Ailanthus altissima), especie oriunda de China que coloniza memorablemente las escombreras, cunetas o solares.
En geología, se aplica a los materiales ocasionados a distancia de su posición actual. Tal desplazamiento puede deberse a arrastres producidos por glaciares o ríos, por rodamiento por gravedad en laderas, o por lanzamiento, en el caso de actividad volcánica.
En ecología, se refiere a aquellos nutrientes o materiales que se incorporan a un ecosistema desde el exterior del mismo.
Véase igualmente Autóctono.
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