Ala (anatomía), en biología, uno de los apéndices pares, móviles, que permiten el vuelo. Las aves, los murciélagos y los insectos se autopropulsan en el aire aleteando con sus alas. El pterodáctilo, un reptil extinto, igualmente volaba de esa manera. Este tipo de vuelo, denominado a veces vuelo verdadero, es diferente del planeo, en el cual las alas son extendidas para conservar el vuelo con muy poco o ningún movimiento. El vuelo a través de planeo es empleado por algunos peces, mamíferos, anfibios y reptiles, e igualmente lo emplean a veces ciertas aves, como los halcones, los buitres y las gaviotas.
Entre los vertebrados, el ala es homóloga al miembro anterior o brazo, y adopta formas múltiples. El ala de un ave está cubierta de plumas y forma un soporte y un eje al que se unen los músculos que la mueven. Las alas de un murciélago son meras membranas que están extendidas entre los dedos cambiados, y están unidas a la parte lateral del cuerpo para formar un patagio. Las alas de los denominados animales voladores, como zorros voladores, lagartos voladores y ardillas voladoras, son simples extensiones de la piel a lo largo de los laterales del cuerpo, cuya cometido se fundamenta en posibilitar que el animal salte de árbol en árbol, o desde un árbol hasta el suelo. Entre los invertebrados, apenas se hallan alas legítimas en los insectos; suelen consistir en dos capas de piel que se preservan sobre tubos huecos o nervaduras, con frecuencia cubiertas de escamas diminutas, y invariablemente comunicadas con el sistema respiratorio (véase Insecto). En el pez volador se llevan a cabo movimientos semejantes al vuelo a través de grandes aletas pectorales, que se han cambiado para servir de alas.
Las alas son igualmente empleadas para otros fines diferentes del vuelo: ayudan a numerosas aves acuáticas a bucear y nadar, permitiéndoles realizar movimientos por debajo del agua que son análogos a los del vuelo; sirven para resguardar los huevos o a las frágiles crías, de la lluvia o del calor del sol durante el periodo de incubación o la etapa de cría, y pueden ser empleadas como armas por animales como el pavo o el ganso de alas en forma de espolón. Cuando vuelan pájaros como la agachadiza común y el colibrí, y muchos otros insectos, las alas producen un sonido audible. Las alas igualmente pueden ser un medio de expresión emocional, especialmente durante la estación de apareamiento. En estos casos, las alas son batidas, elevadas, extendidas, batidas contra el cuerpo o situadas juntas sobre el dorso, para hacer sonidos semejantes a un tamborileo o crepitación, que manifiestan excitación o sirven como señales o retos.
Para el diseño de las alas de aeroplanos, véase Aerodinámica; Avión.
— 90 visualizaciones.