Acuerdo de Stormont

Acuerdo de Stormont o Acuerdo de Viernes Santo, nombre que recibió el conjunto de pactos sellados el 10 de abril de 1998 en el castillo de Stormont, ubicado en los alrededores de Belfast, por las primordiales fuerzas políticas implicadas en el conflicto de Irlanda del Norte.

Las partes en enfrentamiento, esto es, los republicanos católicos, defensores de la agrupación de Irlanda, los unionistas protestantes, muy divididos en diferentes tendencias políticas, y los respectivos gobiernos del Reino Unido y de la República de Irlanda, eligieron en 1996 como mediador al ex senador americano George Mitchell, que fijó unos demandas mínimos para admitir a cualquier fuerza política en las negociaciones. Esencialmente, estos demandas se reducían a la desiste a la violencia como arma política. Las charlas se aceleraron en diciembre de 1997, en el momento en que el jefe republicano del Sinn Féin, Gerry Adams, se entrevistó con el primer ministro británico Tony Blair. A lo largo de varios meses, durante los que no cesó la violencia en el territorio, unionistas y republicanos se esforzaron en llegar a un pacto.

Finalmente, las partes se aislaron durante dos semanas en el castillo de Stormont, sede del Ministerio británico para Irlanda del Norte (al frente del cual se encontraba Mo Mowlan), donde redactaron un documento que fue ratificado de forma mayoritaria por los habitantes de la provincia y por los habitantes de la República de Irlanda, en un referéndum conmemorado el 22 de mayo de 1998. El Acuerdo de Stormont, respaldado por los primeros ministros irlandeses (Bertie Ahern) y británico (Tony Blair), preveía la producción de una asamblea autónoma y de un consejo ministerial interfronterizo Norte-Sur. El pacto se había conseguido con la contribución mediadora de Ahern, de Blair y del presidente americano Bill Clinton.

Desde ese momento se realizaron charlas para llegar a un desarme de todos los conjuntos mezclados, sin embargo la negativa de la organización terrorista IRA a proporcionar las armas dificultó la normal puesta en práctica del Acuerdo de Stormont. Su aplicación vivió un momento optimista el 23 de octubre de 2001, en el momento en que el IRA difundió que había empezado a destruir armas, explosivos y municiones de sus arsenales para respaldar la prolongación del proceso político, colapsado por la desiste, ese mismo año, de David Trimble como ministro destacado del Consejo Ejecutivo norirlandés (el gobierno autónomo de Irlanda del Norte brotado de la Asamblea prevista en Stormont) y de los ministros unionistas de dicho órgano. A su vez, el gobierno británico de Blair inició un día después el desmantelamiento de específicas instalaciones militares situadas en Irlanda del Norte.
Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio

— 267 visualizaciones.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *